En un huerto bien cuidado, y a cada lado del mismo se encontraba un naranjo y un abeto navideño.
Cada cual se preguntaba, sus funciones en la vida y si lo hacían bien… abasteciendo a medida.
-¡Oye!, dice el naranjo:
Mi fruto es muy sabroso, refresca, despeja la sed, da sombra al peregrino que su camino inició, y añade… gran vitamina C.
¡Y tu, abeto querido!
-Contéstale el abeto:
Mi misión, ornamentar y oxigenar a la vez, y en el mes de diciembre… me visten con caché.
¡Qué te parece naranjo!...
¡Bueno…muy bueno!
Moraleja: Todos somos necesarios, todos nos complementamos…Y aquel que no lo piense… ¡A ese, le repudiamos!
Asun.
sí! todos somos necesarios :)) un biquiño!! y muchas gracias por tu visita :)) me encantan los árbolesss!!
ResponderEliminarLa naturaleza nos da cotidianamente ejemplos de coexistencia, los seres humanos formamos parte de ella y tenemos esa misma funsión en la tierra, complementarnos, nadie es innecesario.
ResponderEliminarBesos:)
En la vida todos somos utiles, necesarios y nos complementamos!!
ResponderEliminarUn abrazo de luz!!
Todos somos necesarios, claro que si, juntos formamos una cadena inmensa en busca de paz y armonía.
ResponderEliminarUn abrazo amigas.